Bancar la música independiente

Fotografía: Valentina Becker

“No es un banco de música marginal, es un banco de música producida en nuestro país que tiene como función discutir a la lógica del mercado que define qué va sonar en las radios argentinas”. Así definió Diego Boris, titular del Instituto Nacional de la Música, al banco de música independiente que se presentó hace unos días. 

La apertura del órgano nacional no fue casual. Su creación se fundamentó en el artículo 65 de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual - N.º 26.522, el cual establece que como mínimo el treinta por ciento de la música emitida por las radios del país deberá ser de origen nacional, sea de autores o intérpretes nacionales. Asimismo, la mitad de ese porcentaje deberá ser música producida en forma independiente, donde el autor y/o intérprete ejerza los derechos de comercialización de sus propios fonogramas. Gracias al convenio de Cooperación entre la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual y la Federación Argentina de Músicos Independientes, Argentina es el primer país en formar una institución de este tipo y que garantice, ante todo, la difusión del músico. 

Llegar a esta instancia no fue nada fácil, explicó Boris. La creación de la Ley 26.522 fue el primer paso, luego el objetivo fue terminar con el monopolio que solo divulga lo que está acordado con un sector negativo de la industria musical. “Los medios de comunicación, concentrando en una alianza con las empresas, garantizaban una difusión que estaba alejada de la mayoría de los músicos. La posibilidad de articular y difundir un material es un derecho que tiene cualquier creador”, sostuvo Boris. 

En una primera instancia se logró armar un listado nacional de los discos producidos de forma independiente. En este censo figuran más de cuatro mil trabajos de los cuales 800 ya están subidos al banco y pueden ser descargados por las radios de todo el país. Estas deberán ingresar al sitio oficial - www.musicaindependiente.org – y registrase para poder acceder al material discográfico. Boris aclaró que las radios deben tener un correo a su nombre y en regla la documentación con la AFIP y el AFSCA. “Radios más grandes planteaban que no tenían acceso para comprar ese material y cumplir con el artículo 65. Por eso, una vez que las radios estén logueadas (sic) podrán acceder a los 800 discos autorizados, para descargar las canciones y difundirlas”, agregó.

La figura de los músicos independientes es fundamental para que el banco siga creciendo. Por eso es que a lo largo del país existen distintas sedes para que ellos puedan presentar su material discográfico, que debe estar respaldado por la Dirección Nacional de Derechos de Autor. En Tucumán, los encargados son los integrantes de la Unión de Músicos Independientes Tucumanos Autoconvocados (UMITA). “Los músicos que quieren sumar sus trabajos deberán tener el disco físico y dirigirse a la sede que están en cada provincia. Allí deberán presentar el material discográfico y la presentación del formulario de obra publicada en Dirección Nacional de Derecho de Autor. La sede será la que suba el material al banco y, hay que destacar, tenemos 25 organizaciones a lo largo del país”, aclaró Boris.

Para los artistas que no pueden llegar hasta la sede provincial existe la alternativa virtual. Deberán mandar un correo electrónico a info@musicaindependiente.org. Luego recibirán la información correspondiente y un instructivo de cómo subir el material y qué documentación deberán enviar para comprobar que el disco existe y está registrado. 

Actualmente quedan 700 discos por ser subidos al banco, solo restaría terminar de comprobar la autoría, tal como está definido. Sin embargo, en menos de un mes, esperan redoblar la apuesta e incrementar el número a medida que los músicos se acerquen. “Hay mucha música independiente, hay 4 mil discos censados. Pero hay algunos en donde los grupos no están vigentes y nadie se encargó de acercar el material. Pero en realidad esto es un construcción, hoy se presentó pero queremos que dentro de 10 años siga existiendo. Mientras que los músicos sigan confiando y creyendo en este proyecto se puede cambiar la realidad”, finalizó el titular del Instituto Nacional de la Música.